Los estudiantes que están emprendiendo y ganando experiencia laboral en pandemia
Jesús Cortés, Lester Hernández y Jordy Branks son tres jóvenes que están emprendiendo en plena pandemia. Desde el 2019 estos estudiantes de 17 y 18 años participan del programa “Padrino Empresario”, que le ha permitido desarrollar negocios en sus entornos y tener la oportunidad para que realicen una pasantía laboral.
En los últimos dos años, el programa adscrito al Ministerio de Desarrollo Social (MIDES) ha beneficiado a 1,009 estudiantes de escuelas secundarias, al proporcionarle una beca que les ha transferido un millón 45 mil 928 balboas a los participantes.
Las más de 100 empresas que se han suscrito al programa pagan un bono por horas de pasantía, que les permite a los jóvenes obtener experiencia. También se les capacita para que desarrollen negocios sostenibles. Los resultados han sido satisfactorios.
Jesús, quien ostenta un promedio escolar de 4.2, ha instalado en su casa ubicada en el corregimiento de Pacora una heladería que le genera ingresos de 40 balboas a la semana, lo suficiente para ahorrar para su colegiatura y ayudar a su familia.
También ha incursionado en la recarga de juego online y la venta por internet. Aunque la pandemia ha limitado las oportunidades laborales, Jesús ha irrumpido en nuevos mercados que prometen mucho.
Su práctica laboral de cuatro horas diarias la realiza en la empresa Envases Universales,donde ha aprendido organización, trabajo en equipo y otros menesteres del campo laboral.
Mientras que Lester Hernández, estudiante de turismo de la Escuela Profesional Isabel Herrera Obaldía, tiene en su residencia una barbería que le genera ingresos para cubrir sus estudios.
Su práctica laboral la realiza en la empresa Marsh Semusa, una corredora de seguro donde está teniendo su primer contacto con el entorno laboral. Se trata de una oportunidad que se le presenta a Lester, cuyo promedio es de 4.2, de poder optar por una plaza de empleo.
Jordy también se sumó a esta iniciativa con su puesto de venta de snacks, un negocio que cubrió parte de los gastos educativos en el colegio Jeptha B. Duncan, donde se graduó de bachiller en tecnología mecánica.
Padrino Empresario ha logrado insertar al mercado laboral a 24 estudiantes (todos mayores de edad), un escaño que sin experiencia le sería difícil a cualquier joven que busca empleo por primera vez.
El programa ha calado con fuerza en la provincia de Panamá al transferir 833 mil 492 balboas, seguido de Colón con 106 mil 298 balboas, Los Santos con 23 mil 398 balboas y Herrera con 23 mil 55 balboas transferidos a estudiantes con interés de emprender y luchar por un empleo digno con todas las garantías de protección que exige la ley.
Para la ministra de Desarrollo Social, María Inés Castillo, el programa nace como una alternativa de prevención dirigida a adolescentes expuestos a situación de riesgo social, cuyas edades oscilan entre los 15 a 17 años de edad, para minimizar la vulnerabilidad a los problemas económicos y psicosociales propios de su entorno y núcleo familiar, a fin de que puedan continuar sus estudios y, por ende, mejoren su calidad de vida.
También le ha permitido a la empresa privada ejercer la función de formadores, ya que durante la pasantía los estudiantes están capacitados en funciones específicas que les permite a las compañías crear colaboradores con perfiles.
“Estos programas están alineados a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, específicamente con el ODS 17, que motiva a los gobiernos de turnos establecer alianzas para lograr oportunidades, donde los jóvenes sin experiencia laboral sean incluidos en el desarrollo económico del país”, indicó Castillo.
La Coordinadora del Programa Padrino Empresario, Adelina Lezcano de Hernández, destacó el esfuerzo que han realizado las empresas adheridas al programa por mantener las becas y brindarles a los estudiantes plazas de empleos.
Jóvenes en busca de un futuro prometedor
Detrás de estos emprendimientos hay sueños que se están forjando. El próximo año Lester habrá salido del programa y tendrá la opción de obtener una vacante en la compañía aseguradora y estará listo para estudiar administración de empresa.
Las opciones son similares para Jesús que buscará acceder a una plaza de empleo, mientras hace los estudios de ingreso para la academia de policía y así desarrollar una educación castrense que mejore su calidad de vida y la de su familia.
Y Jordy está por ingresar al Instituto Técnico Superior Especializado (ITSE), donde estudiará mecánica automotriz de equipo liviano.
“Padrino Empresario le ha enseñado a mi hijo que las metas se forjan con sacrificio y mucho empeño. La beca y la pasantía laboral le forjaron a mi hijo carácter y le ayudó a trazar metas. Estoy muy agradecida por todo lo que le ha pasado”, afirmó Yaribeth Hinestroza, madre de Jordy.
Jesús, Lester y Jordy a sus cortas edades han logrado asumir responsabilidades que los ayudarán a su desarrollo profesional. Han emprendido, se han capacitado y han logrado conocer la interioridad de una empresa. Pero lo más importante es que se han alejado de las calles y han decidido trabajar por un lograr un futuro prometedor.
