Más de 19 mil panameños con discapacidad severa se benefician del programa Ángel Guardián
En los últimos dos años más de 19 mil panameños (as) con discapacidad severa se han beneficiado del programa Ángel Guardián a través de las transferencias monetarias condicionadas que les permite a estas personas tener acceso a alimentos, medicamentos y artículos de primera necesidad.
El programa, adscrito al Ministerio de Desarrollo Social (Mides), ha transferido en este año 2021 un total de 18.4 millones de balboas a personas con cuadros clínicos como microcefalia, parálisis cerebral, autismo, síndrome de Down, retraso mental y otras enfermedades que requieren de atenciones especiales.
El programa beneficia directamente a 4,994 menores de edad dividido en los siguientes rangos de edades: 1,277 niños (as) de 0 a 8 años; 2,525 de 9 a 14 años y 1,192 tienen entre 15 y 17 años.
De acuerdo con un reporte del Mides, el programa concentra su fuerza en la provincia de Panamá con 4,913 beneficiarios, seguido de Chiriquí con 3,569 y Panamá Oeste con 2,240 (Ver mapa).
La ministra María Inés Castillo explicó que Ángel Guardián es un programa noble que le brinda a su membresía acceso a controles médicos, terapias, charlas de salud mental y programas de educación inclusiva. Estos servicios son esenciales para que gocen de un buen estado de salud tanto física como mental.
Pero también ofrece atención especial a los tutores que están al cuidado de sus familiares las 24 horas del día.
Castillo indicó que los beneficiarios son personas que por su discapacidad no ingresaron al mercado laboral y requieren del apoyo del Estado, para tener una vida con oportunidades, igual que todos.
La mayor cantidad de los inscritos de Ángel Guardián (7,989) tienen entre 30 y 59 años. Estas cifras, a consideración de la ministra, demuestran la necesidad que existe de seguir atendiendo a una población vulnerable que requiere de sistemas de protección.
Ángel Guardián ha crecido con los años. En agosto de 2013 arrancó con una planilla de 1,657 beneficiarios, ocho años después la cifra ascienden a más 19 mil panameños, lo que demuestra que existe un plan de trabajo enfocado en proteger a los más vulnerables.
Castillo recordó que estas transferencias están alineadas a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, específicamente con el ODS #10 que hace referencia a la reducción de las desigualdades, un compromiso que asumió el Estado y que está permitiendo que personas relegadas del desarrollo social tengan oportunidades.
Los rostros detrás de Ángel Guardián
Ashly Carolina Herrera y Christopher González son algunos de los rostros que le dan vida al programa Ángel Guardián.
Ashly, quien reside en el distrito de La Chorrera, tiene una historia de superación. A pesar de haber nacido con parálisis cerebral ha tenido una vida llena de gratos momentos. Su perseverancia ha rendido buenos frutos. Sólo vasta ojear su boletín para saber que es una excelente estudiante.
En materias como matemática, español y expresión artística alcanzó un promedio final de 4.9, 4.9 y 5.0, respectivamente. Su maestra Carmen Rodríguez la describe como una excelente alumna, siempre entusiasta y alegre, dispuesta aprender en todo momento y capaz de superarse así mismo.
Mientras que Christopher –quien padece de parálisis cerebral, epilepsia y microcefalia– es un destacado estudiante. Este pequeño de 10 años que vive en el corregimiento de Changuinola, provincia de Bocas del Toro, cursa el quinto grado con calificaciones de 4.1.
La discapacidad que enfrenta más que restarles oportunidades, le imprime ganas por encontrar un espacio, donde pueda aportar todo lo que sabe y lo que le queda por aprender.
Para Celedonia Taylor, madre de Christopher, el Estado ha dado pasos importantes en lo que respecta a cobertura a favor de las personas con discapacidad severa. Aunque reconoce que las transferencias económicas no cubren todos los gastos, ayudan a solventar gran parte de los insumos que requiere Christopher para tener una vida digna.
José Alvendas, director del programa Ángel Guardián, reconoce que la historia de Ashly y Christopher refleja el esfuerzo que el Gobierno Nacional está haciendo en favor de la inclusión y el derecho que tiene todas las personas con discapacidad severa.
En ese sentido, adelantó que el programa se está reforzando con el fin de brindar todas las atenciones que requieren los beneficiarios.
“Estamos comprometidos con el bienestar de nuestros inscritos y eso incluye su estado de salud, físico, emocional y mental, así como su inclusión a la sociedad”, destacó Alvendas.
Del 22 de noviembre al 17 de diciembre de este año Ashly y Christopher recibirán la cuarta transferencia económica del 2021 que les proveerá de lo necesario para seguir viviendo una vida plena, llena de oportunidades, sueños y esperanza.
