Resultados de diálogos sobre sistemas alimentarios sostenibles le permitirá al Estado reforzar las cadenas de producción
Ciudad de Panamá, 14 de diciembre de 2021.- La Ministra de Desarrollo Social, María Inés Castillo, recibió el documento oficial de los resultados de los Diálogos Nacionales y Subnacionales sobre los Sistemas Alimentarios Sostenibles “Cerrando Brechas para la Seguridad Alimentaria”, que permitirá trazar una ruta para los próximos 10 años en las políticas públicas dirigidas a garantizar la alimentación de todo el país.
Entre los principales temas identificados se destacan cuatro variables, entre ellas, la de impulsar formas sostenibles de producción; trabajar hábitos actuales de consumo, con énfasis en niñez y juventud; uso y manejo de recursos hídricos; y abordar problemas de pérdidas de alimentos.
La ministra indicó que Panamá asumió la responsabilidad de fortalecer sus sistemas alimentarios nacionales y subnacionales para cumplir las metas de desarrollo sostenible planteadas en la Agenda 2030 y los ODS; utilizando la discusión pública y representativa de la diversidad territorial y demográfica del país, como estrategia para mantener una visión actualizada del sector alimentario.
La ministra estuvo acompañada por el ministro de Desarrollo Agropecuario, Augusto Valderrama; y el Coordinador Subregional para Mesoamérica y Representante de la FAO, Adoniram Sanches, quienes coincidieron que este documento fortalecerá la seguridad alimentaria, ya que permitirá tomas de decisiones basadas en datos cuantificables reales.
El ministro Valderrama manifestó que con este nuevo esfuerzo se están construyendo sociedades dignas, para que las nuevas generaciones puedan heredar y sentirse orgullosos de convivir pacíficamente en este planeta.
El documento, que fue elaborado con la asesoría de las Naciones Unidas, se centró particularmente en aquellos sectores de la sociedad que tienen menos recursos e influencia y que tienden a ser lo más difíciles de alcanzar.
La ministra María Inés Castillo agregó que los diálogos permitirán transformar los sistemas alimentarios hacia nuevos patrones de consumo saludables, que ayuden a la población a mejorar su salud y combatir los altos índices de sobrepeso (72%) y obesidad (35%), que afectan a la población mayor de 18 años.
“La manera en la que producimos, procesamos, intercambiamos, consumimos y desechamos nuestros alimentos, están condicionados a cómo nos relacionamos con la sociedad, con el resto del mundo y con el medio ambiente”, destacó Castillo.
La titular de la cartera social explicó que el informe contó con la participación de 631 participantes del sector público y privado que a través de un conversatorio transparente ha permitido empoderar a la población panameña.
Principales hallazgos
Castillo reveló que este ejercicio público identificó cuatro acciones estratégicas en la ruta para el fortalecimiento de los sistemas alimentarios: fortalecimiento de la agricultura familiar; innovación y tecnología de los sistemas productivos; nuevas relaciones con los mercados y sostenibilidad ambiental; y resilencia al cambio climático.
También señaló los principales temas y aportes identificados, entre ellos, impulsar formas sostenibles de producción, abaratar los costos de producción; trabajar en los hábitos actuales de consumo de alimentos haciendo énfasis en la niñez y juventud; el uso y manejo de los recursos hídricos; fortalecer mercados periféricos; involucrar la temática de género e introducción de la agricultura orgánica; fomentar la tenencia de tierra, entre otras recomendaciones.
Castillo cerró su participación recordando que la seguridad alimentaria integra todos los pilares de desarrollo sostenible: el económico, social y ambiental; y por ello es sustento clave de la política social para erradicar la pobreza y reducir todas las desigualdades que pone en riesgo la convivencia pacífica de Panamá y la región.
Los participantes concluyeron que los territorios son fundamentales para construir un esquema de gobernanza que permita que nuestras cadenas alimentarias sean no sólo productivas, también verdaderamente inclusivas, fuentes de nutrición, ambientalmente sostenibles y resilientes a crisis como la que vivimos durante la pandemia de la Covid-19.
Entre los sectores convocados estuvieron organizaciones de productores de alimentos; agroindustrias; sindicatos y gremios que los representan y laboran dentro de ellos; entidades gubernamentales; pequeñas, medianas y grandes empresas pertenecientes a sistemas alimentarios. Asimismo, se hicieron presentes representantes de la sociedad civil; organismos científicos e instituciones académicas; escuelas y otras instituciones educativas; comunidad de restaurantes, entre otros.